Manual de cuidados del Platycerium bifurcatum o Helecho australiano

¿Te has fijado alguna vez, en esas plantas que parecen cuernos de ciervo colgando de las paredes? Pues eso es un Platycerium bifurcatum, también conocido como Helecho australiano. Es una planta muy bonita que viene de Australia y otras zonas tropicales de Asia.

Lo interesante de esta planta es que crece de una forma muy rara. Con unas hojas que parecen escudos pegadas a la pared, y otras que cuelgan como si fueran cuernos. Este helecho es epífito, lo que significa que en la naturaleza crece sobre otras plantas, pero sin hacerles daño.

No es un parásito, solo usa a los árboles como apoyo para estar más cerca de la luz. En casa, puedes ponerlo en una maceta colgante o montarlo en un trozo de madera o corcho. Así parece que está flotando en la pared y queda muy bien.

Cómo cuidar tu helecho australiano

La luz es muy importante para el Platycerium bifurcatum. Le gusta mucha luz, pero no el sol directo, que puede quemar sus hojas. Un sitio ideal es cerca de una ventana con luz brillante pero filtrada.

En cuanto a la temperatura, es una planta tropical, así que le va bien el calorcito. Lo mejor es mantenerla entre 15 y 25 grados. Si hace más frío, puede que se le pongan las hojas marrones.

El riego es un poco complicado con esta planta. No le gusta que la encharques, pero tampoco que se seque del todo. Lo mejor es regar cuando notes que el sustrato está casi seco. En verano necesitará más agua que en invierno. Una buena idea es pulverizar las hojas de vez en cuando para darle la humedad que le gusta. Ojo con no mojar demasiado la base de la planta, que se puede pudrir.

Suelo y alimentación para un helecho feliz

El sustrato para el helecho australiano, tiene que drenar muy bien. Puedes usar una mezcla con turba, corteza de pino y perlita. Así evitas que se encharque y se pudran las raíces.

En cuanto al abono, no necesita mucho. Con darle un fertilizante líquido diluido cada mes durante la primavera y el verano, es suficiente. En otoño e invierno, déjalo descansar.

La poda del Platycerium bifurcatum no es muy necesaria. Solo tienes que quitar las hojas que se sequen, o se pongan feas. Hazlo con cuidado para no dañar el resto de la planta. Si ves que se hace muy grande, puedes cortar algunas de las hojas que cuelgan, pero no te pases, que las necesita para alimentarse.

Cómo multiplicar tu helecho australiano

Propagar el Platycerium bifurcatum, es bastante fácil. La forma más común es por división. Cuando la planta es grande y tiene varios brotes, puedes separarlos con cuidado y plantarlos por separado.

Otra opción, es usar las esporas que produce en la parte de atrás de las hojas. Es un poco más complicado y lleva más tiempo, pero es interesante si te gusta experimentar.

Otros Platycerium

El género Platycerium, tiene más especies aparte del bifurcatum. Por ejemplo está el Platycerium superbum, que es enorme y parece una escultura. También está el Platycerium veitchii. Este es más pequeño y tiene las hojas más redondeadas. Cada especie tiene su forma única de crecer y sus propios cuidados. Pero esos sí, todas son igual de fascinantes.

El helecho australiano en diferentes espacios

El Platycerium bifurcatum queda genial en muchos sitios. En una sala de estar, montado en la pared, da un toque súper natural y moderno. En el baño también va muy bien porque le gusta la humedad, pero asegúrate de que tenga suficiente luz. Incluso puedes ponerlo en una oficina para darle vida al espacio.

Eso sí, ten en cuenta que necesita cuidados regulares. Así que, no es precisamente la mejor opción si te vas mucho tiempo de viaje. En resumen, el helecho australiano es una planta muy interesante. Puede llegar a convertirse en la favorita de tu casa. Con un poco de cuidado y atención, tendrás un compañero verde que durará muchos años. Ya verás como impresionará a todas tus visitas.