La flor del inframundo: Lycoris radiata
Seguro que alguna vez has oído hablar de la flor japonesa de la muerte, infierno, o inframundo. Sí, tiene todos estos apodos tan bonitos. Pero para ser sinceros suena a algo salido de una peli de terror. Te adelanto que existe de verdad y se llama Lycoris radiata.
Los japoneses la conocen como higanbana o flor del equinoccio. Es una planta con un aspecto de lo más curioso: tiene unos pétalos rojos largos y finos que parecen tentáculos. Cuando florece, da la sensación de que cientos de arañas rojas invadiendo allí donde crece.
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Esta flor tiene muy mala fama en Japón. La gente la asocia con la muerte y el más allá. Dicen que crece en los caminos que llevan al infierno. Vamos, que si ves un campo lleno de estas flores, mejor date la vuelta y sal por patas 😀 Aunque seamos sinceros, es difícil resistirse a su belleza hipnótica, porque es como si te atrajera con sus pétalos ondulantes.
El secreto de la flor del infierno
¿Te imaginas una flor que florece y echa hojas, pero nunca al mismo tiempo? Pues eso es justo lo que hace la Lycoris radiata. Cuando saca sus llamativas flores rojas, no tiene ni una sola hoja. Y cuando le salen las hojas, las flores han desaparecido por completo. Es como si jugara al escondite con sus propias partes. Esta rareza ha contribuido a su aura misteriosa.
Los japoneses le han puesto un montón de apodos a esta flor basados en sus características únicas. Algunos la llaman "flor del olvido" porque dicen que hace que te olvides de todo lo demás cuando la miras. Otros la conocen como "flor fantasma" por su forma de aparecer y desaparecer. Sea como sea, está claro que esta planta no deja indiferente a nadie.
Usos sorprendentes de la flor maldita
A pesar de su mala reputación, la Lycoris radiata tiene algunos usos bastante útiles. Hace tiempo, sus bulbos se usaban para hacer veneno para flechas. Esta flor tan bonita esconde un secreto mortal en sus raíces. Pero no todo es malo. En la medicina tradicional china se ha usado para tratar problemas respiratorios y circulatorios.
Otra curiosidad es que los agricultores japoneses plantan estas flores alrededor de sus campos de arroz. ¿Para qué? Pues resulta que los roedores odian el olor de los bulbos. Así que actúan como una barrera natural contra las plagas. Lo tiene todo, una flor que da miedo a los humanos pero también espanta a los bichos.
La leyenda de las flores gemelas
La Lycoris radiata tiene su propia historia de amor imposible. Según una leyenda japonesa, esta flor tiene una hermana gemela llamada Lycoris alba, que es blanca. Se dice que estas flores están enamoradas pero nunca pueden encontrarse. Cuando una florece, la otra se marchita. Por fin una bonita historia sobre esta flor, aunque sea meldramática.
Esta trsite historia ha inspirado a muchos artistas y escritores japoneses. La flor aparece en un montón de poemas, canciones y hasta en animes. Se ha convertido en un símbolo del amor no correspondido y de la tragedia. Así que la próxima vez que veas una de estas flores, piensa que quizás esté suspirando por su amor perdido.
Cómo cultivar tu propia flor del infierno
Se que ahora te ha entrado el gusanillo de tener tu propia flor de la muerte en casa. Pues no es tan difícil como parece. Estas flores son bastante resistentes y no necesitan muchos cuidados. Lo importante es plantarlas en un suelo bien drenado y darles sol directo. Eso sí, ten paciencia. Pueden tardar hasta tres años en florecer por primera vez.
Un consejo que te doy: si las plantas en tu jardín, no te asustes cuando desaparezcan en verano. Es normal. Las hojas se secan y la planta entra en reposo. Pero no te preocupes, volverá a salir en otoño con sus flores espectaculares. Es como si renaciera de sus cenizas cada año. Ahí tienes otro dato a tener en cuenta y que le aporta aún más misterio.
La flor del infierno en la cultura pop
La Lycoris radiata no solo aparece en leyendas antiguas. También se ha colado en la cultura moderna japonesa. La puedes ver en un montón de animes y videojuegos. Por ejemplo, en "Tokyo Ghoul" estas flores aparecen como un símbolo recurrente. Y en el juego "Siren", las usan para crear una atmósfera siniestra.
Pero no todo es terror y muerte. Algunos artistas la usan como símbolo de renacimiento y transformación. Al fin y al cabo, es una flor que desaparece y vuelve a surgir cada año. Así que la próxima vez que veas una Lycoris radiata en alguna serie o película japonesa, ya sabrás que no está ahí por casualidad. Tiene todo un significado detrás.