Sinningia speciosa o Gloxinia

Sinningia speciosa o Gloxinia: cuidados generales

 

La Sinningia speciosa, comúnmente conocida como gloxinia, es una hermosa planta de interior originaria de Brasil. Con sus vistosas flores en forma de trompeta y sus grandes hojas aterciopeladas, no es de extrañar que sea una de las plantas de interior más populares.

Hoy aprenderemos sobre sus requerimientos de cultivo, los métodos de propagación y los problemas más comunes que pueden afectarla.

Contenido
  1. Características principales
  2. Requerimientos de cultivo
  3. Propagación
  4. Problemas más comunes
  5. Cultivo en exterior

Características principales

La gloxinia es una planta herbácea perenne de la familia de las gesneriáceas. Presenta un tallo subterráneo llamado rizoma, del que emergen las hojas y las flores.

Anuncios

Las hojas son grandes, de forma ovalada o acorazonada, con el borde liso o ligeramente ondulado. Su color varía del verde intenso al verde grisáceo, y tienen una textura aterciopelada muy característica.

Las flores se producen en tallos erectos y son tubulares, con el borde de los pétalos ondulado. Su color puede ser blanco, rosa, rojo, púrpura e incluso presentar combinaciones bicolor muy llamativas. Florecen en verano y otoño.

Requerimientos de cultivo

Aunque originaria de selvas tropicales, la gloxinia se ha adaptado muy bien al cultivo en interior. Le encantan los ambientes cálidos, luminosos y húmedos.

Requiere abundante riego en verano, cuando está en activo crecimiento y floración. En invierno se debe reducir tanto el riego como la luz para favorecer el periodo de reposo. Los sustratos porosos y bien drenados, ricos en materia orgánica, son los más adecuados.

También precisa una humedad ambiental elevada. Rocíe las hojas con regularidad y coloque la maceta sobre un plato con grava mojada para aumentar la humedad circundante.

Propagación

La gloxinia se multiplica principalmente por semillas. La germinación es rápida en condiciones de calor y humedad elevados. También se puede propagar por división de rizomas al renovar las plantas después del periodo de reposo invernal.

Anuncios

Los esquejes de tallo herbáceo enraízan bien, especialmente si se aplica hormona enraizante en polvo. Conviene mantenerlos en ambiente muy húmedo hasta que emitan raíces.

Problemas más comunes

Aunque las gloxinias son plantas bastante resistentes, algunos problemas pueden mermar su vigor y belleza. Los más habituales son:

  • Caída prematura de botones y flores, debida a estrés por frío o sequedad ambiental.
  • Manchas pardas en hojas, causadas por hongos si hay excesiva humedad
  • Cochinillas u otros insectos, que se combaten fácilmente con jabones insecticidas apropiados.
  • Hojas que amarillean por falta de luz o exceso de riego.

Con unos sencillos cuidados y requerimientos adecuados, disfrutaremos de esta magnífica planta en todo su esplendor floral.

Cultivo en exterior

Aunque tradicionalmente se ha cultivado como planta de interior, algunas variedades de gloxinia también se pueden plantar en el jardín o en la terraza si el clima no es muy frío. Eso sí, requerirán protección en invierno.

Se recomienda situarlas en un lugar luminoso, resguardado del viento y los rayos directos del mediodía. Una ubicación orientada al este o al oeste sería perfecta. Hay que vigilar bien el riego, manteniendo el sustrato húmedo pero no encharcado para evitar pudriciones.

En climas muy cálidos se debe procurar algo de sombra por las tardes. Una pérgola o toldo que atenúe el sol directo sería muy beneficioso. También conviene aumentar la humedad ambiental en torno a las plantas.

Con estos cuidados especiales, nuestra querida gloxinia también nos alegrará el exterior de la casa con su floración estival.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *